NICE-TO FUNK! – Mustafunk en Niceto Club (01/06/2019)

Sábado a la noche. Momento perfecto para salir, divertirse, y dejar atrás, aunque sea por un momento, todo lo que ocurrió en la semana.

En Niceto Club, tras 5 meses sin tocar en Capital, se presentó Mustafunk. Y lo que se vivió fue una noche poderosa y de goce absoluto.

Pasadas las 21:30, se podía ver un Niceto absolutamente repleto, donde no entraba ni un alfiler. Las entradas estaban agotadas y había una fuerte presencia de la prensa. Ya había terminado de tocar El Tony, junto al bajista de ‘Musta’, Agustín Pettinato. El público los había despedido con mucho fervor luego de la interpretación de “Heart Shaped Box”, de Nirvana.

Minutos antes de las 22, desde el escenario, se hizo una seña para que se abra el telón. La mesa estaba servida: "Ciudad Albinogólpica" fue el primer plato y la gente los recibió con mucha euforia. Se observó a Martín Pedernera (cantante) bailando sin parar y dejando la garganta en cada verso.

Terminado el segundo plato, la gente aplaudía y gritaba sin parar “Mauricio Macri la p… que te parió”. Inmediatamente siguió “Haarp”, donde el público comenzó a saltar y a corear los punteos de bajo del principio (sabiendo que iban a escuchar un tema que contiene una poderosa crítica política). Agustín Petinatto (bajista) y “El Turko” Marinelli (guitarra y voz) no paraban de moverse. Sobre todo este último, que a mitad de la canción, gritó el mejor insulto que escuché referido al "gato" desde un escenario. Cuando la letra decía “¿Dónde están los cambios?”, “el Turko” rugió un “Mauricio Macri la rep…. Madre que te re mil parió hijo de p…”.

La monada no paraba de gritar y saltar en cada canción, “OLE OLE OLE MUSTAFUNK”. Luego de algunas canciones más, Martín se paró en el escenario y preguntó si habían escuchado “Culo”, su nuevo trabajo. Todos respondieron que sí, dando pie a “Mi Hendrix”, el cuarto tema del disco.

A Agustín le tiraron un porro: agradeció y lo prendió. Martin agarró el micrófono y le preguntó a Serafín Rodriguez (primera guitarra) si con la barba que tiene le iba bien en el amor, el guitarrista afirmó. Así, el cantante dijo que en ese momento las canciones rockeras iban a ser dejadas de lado (por un rato) en el show, para darle lugar a las canciones de amor.

Para ese momento, sumaron a El Tony, para interpretar el clásico "Yogurt", teniendo a los fanáticos y fanáticas como protagonistas, ya que todos cantaron el tema con todas sus fuerzas. Terminado el himno mustafunkero, Martín se puso a improvisar una letra de reggae y fue seguido por Camila Marinelli (batería) y Agustin. Al instante se sumaron las dos violas. Tras algunos temas con el mismo tinte de amor, Martín llamó al “sexto Mustafunk”. Guillermo Arrom estaba en el escenario, listo para tocar. Tenían preparado un cover: “Cementerio Club” de Pescado Rabioso, que incluyó un solo de guitarra alucinante de Guillermo, que logró sacudir todo Palermo. Terminado aquel poderoso blues, los de Paso del Rey volvieron a la carga, saliendo al ataque otra vez con sus temas más “polentas”, haciendo uno de cada disco.

Incluso, en un momento pareció que la gente bajó la intensidad (lógico después de tanto cantar y corear riffs de guitarra). Los musta, como se si hubieran dado cuenta de aquel detalle, hicieron que la gente vuelva a saltar. ¡Y como saltaron! El punteo de bajo de “No me mires” sonó e inmediatamente las energías se recuperaron para continuar el agite. El propio cantante incitaba al público para que grite y salte (él mismo no podía dejar de moverse). Pegada, siguió “Fever”, momento donde más de uno se prendió un fasito (el estribillo dice “Fever, marihuana fever”). Dándose un minuto de respiro, Martín recordó que este 2019 Mustafunk cumple 10 años. “Que los cumplas feliz”, se contestó desde abajo. El show continuó al taco. Habiendo pasado dos horas de recital, arriba y abajo del escenario (Camila, sobre todo) estaban en condiciones como para seguir 2 horas más, si querían. Los del oeste parecían despedirse, pero de abajo se coreaba “una más y no jodemos más”. Musta dio el ok y volvió al escenario para tocar “Juan”. Y a pesar de haber tenido un mini respiro de dos minutos, demostraron la misma energía y actitud que tienen siempre.

Una vez terminado el (ahora sí), último plato, la masa no paraba de aplaudir y gritar. Martín hizo una seña indicando el fin.

Fue un show que tuvo muchos condimentos. Dos años sin tocar en Niceto, muchos temas de “CULO”, invitados y un público muy fiel. Con el sonido y la fuerza que los caracteriza cuando tocan en vivo. En lo personal, creo que todas las bandas (nacionales e internacionales) deberían tener la potencia, la actitud, la performance y la calidad musical que tiene Mustafunk. Como nos tienen acostumbrados… quedamos bolados. 100% impecable. Mustafunk, amigos de la casa, cumplieron 10 años. ¡Que sean muchos más!